EXTERMINIO 2

Título original: 28 weeks later
Género: Terror
Año: 2007
Nacionalidad: Inglaterra y España
Duración: 99 minutos
Dirección: Juan Carlos Fresnadillo
Elenco: Robert Carlyle (Don), Rose Byrne (Scarlet), Jeremy Renner (Doyle), Harold Perrineau (Flynn), Catherine McCormack (Alice), Imogen Poots (Tammy), Idris Elba (general Stone), Mackintosh Muggleton (Andy).



Sinopsis:
Seis meses después de que el virus asolara Gran Bretaña, el ejército de los Estados Unidos declara que la guerra contra la infección ha sido ganada y que la reconstrucción del país puede dar comienzo. Con el regreso de una primera oleada de refugiados se produce la reunión de una familia que se vio separada por los terribles acontecimientos que se produjeron, pero uno de sus miembros porta, sin ser él consciente, un terrible secreto...



Comentarios:
Una casa de campo, varias personas encerradas tratando de alimentarse con lo poco que les queda y la esperanza de salir algún día. Todo viene bastante rutinario hasta que golpea la puerta un niño pidiendo por favor entrar. Lástima que detrás de ese niño hay cientos de infectados intentando comérselo, y esa guarida pasa a ser centro de una masacre o festín, según el cristal con que se mire. Pero Don logra escapar, dejando atrás a todos los refugiados, incluida su esposa que a gritos le pide ayuda mientras él escapa sin más. Cuando vemos a Don escapar de la casa dejando a su mujer en manos de los infectados, logramos entender la naturaleza del terror. Así comienza este film, sorprendente por su buen ritmo narrativo y calidad, más que nada pensando en la poca expectativa que le genera a uno ver una secuela de un director como Danny Boyle dirigido por un desconocido. Pero Fresnadillo no defraudó, y logra quedar bien parado de su segunda película.
Luego de dicho epilogo, pasan seis meses y con la ciudad controlada por el ejército (ya que los infectados al no haber más mortales se fueron muriendo de hambre) deciden repoblar y lentamente regresan a los refugiados ubicándolos en lo que llaman “Distrito Uno”, lugar hiper vigilado por parte del ejercito, mientras el resto siguen recorriendo Londres en busca de algún infectado suelto. Y ahí está Don esperando a sus hijos, que ahora ocupa un cargo de relativa importancia en la “nueva Londres”. Es muy interesante ver cómo, a pesar de todo lo sucedido, todavía el hombre (en los ojos de Don) se sigue interesando en el lujo, mostrándoles con orgullo a sus hijos el pent-house en el que habita, en una ciudad destruida y con su esposa muerta en gran medida por no ayudarla.
La cuestión es que sus hijos, casi como una chiquilinada salen de la zona de seguridad y se dirigen hacia su antigua casa, básicamente para buscar una foto de su mama, pero más que la foto, encuentran a su propia madre viva. La policía los encuentra y llevan a su madre a un laboratorio para experimentar, por ser portador del virus sin reaccionar como los infectados.
Como todos sabemos, cada vez que hay alguien que puede contagiar hay un tonto que se deja, y este tonto es nada más ni nada menos que Don, que con cola de paja le da un beso e inmediatamente después se transforma en un infectado, para generar pánico en todos, a tal punto que altos mandos del ejército tienen que tomar una medida grave por la propagación del virus, matar a todos y retirarse lo más rápido posible. Pero la doctora Scarlet junto al militar Doyle intentaran salvar a los hijos de Don, pero no las tendrán todas consigo.
Uno de los puntos a resaltar, es como la centralidad de los protagonistas van cambiando, hecho que te prohíbe encariñarte con alguno, ya que puede terminar muerto o infectado, que es peor. Aquí no hay héroes románticos, nadie salva vidas por el bien al prójimo, los únicos que arriesgan sus vidas por otros lo hacen simplemente porque creen que ellos en su sangre llevan la cura, lo cual sería un descubrimiento antológico, y no por otro motivo.
Fresnadillo maneja muy bien el ritmo narrativo del film, que nunca llega a aburrirnos y por lo contrario, vivimos momentos de desasosiego y nervios. Tal vez moleste a algunos (como yo) el exceso de movimiento de cámara cuando los infectados ataca, pero es un detalle bastante insignificante con relación a su labor, que podríamos decir que paso con buena nota, inclusive sobreponiéndose al nombre de Danny Boyle que predecía su película.



Bonus:
Gran parte del aspecto y emoción de la película nace del diseño de producción y de convertir a Londres en una especie de escenario post-apocalíptico. Según cuenta, el diseñador Mark Tildesley dirigió su mirada a situaciones similares que suceden en la vida real en busca de inspiración: “Creo que hemos visto ciertos paralelismos con algunas cosas que pasan actualmente, como el huracán Katrina y otras catástrofes por el estilo, en las que se ve a mucha gente que se ha quedado sin casa y cómo se las apañan. Así que piensa en ideas visuales de cómo, ya sabes, se desarrollarían los acontecimientos”. Como resultado, cuando llegó la hora de elegir las localizaciones, Tildesley y el equipo de realización buscó una zona de Londres que pudiera mostrar un contraste entre el Londres posterior al virus y el nuevo Londres que se iba a construir en la película, enseñando al mismo tiempo lo que la población viviría durante la repoblación del país. Su elección de Isle of Dogs (una isla en medio del Támesis) como Distrito Uno resultó ser particularmente adecuada. “Hubo un momento histórico en el que Isle of Dogs reclamó su independencia”, explica Tildesley. “Tenían pensado derribar los puentes y emitir pasaportes. Así que cuando estábamos buscando un lugar con el que dar a entender el punto donde un ejército hubiese podido comenzar la labor de reconstrucción de Londres, decidimos que Isle of Dogs era realmente un gran emplazamiento”.

Puntaje: 7,0

TRAILER: